Torneo KoW Villena (Alicante) - septiembre 2021
¡La comunidad levantina de KoW estamos que no paramos! Este mes, nuevo torneo. En esta ocasión fue en Villena (Alicante), y nos juntamos doce jugadores llegados desde Valencia, Cartagena (Murcia) y la propia Villena. ¡Vamos a por la crónica del torneo!
MI LISTA.
En esta ocasión quería probar algunas nuevas opciones con Enanos Libres (ya os adelanto que no me fue muy bien), por lo que hice cambios en mi lista habitual. Básicamente quité las tres hordas de elementales de piedra y el sacerdote de piedra, y en su lugar metí dos horas de rompeescudos y tres tropas de exploradores (estos pequeños, aunque caros, son excelentes dada su versatilidad, su CS (1) y el hecho de que cada tropa efectúe diez disparos a 4+).
La táctica a seguir era formar un bloque con las hordas de rompeescudos apantalladas por las tropas de exploradores y, gracias a las habilidades scout y pathfinder, avanzar antes de empezar y tomar posiciones en algún bosque u otros elementos de escenografía que me otorgasen ciertas ventajas sobre mi rival. Además, entre eso, el scout del gran elemental y que el resto del ejército tenía un movimiento más o menos alto, me daría una gran movilidad y velocidad. ¡Sería un cambio agradable después de las lentas hordas de elementales de piedra!
Enanos Libres. (2000) - US 21
(R) Jinetes (Brew of strength) → 225
(R) Jinetes → 195
(H) Rompeescudos (mastines) → 245
(H) Rompeescudos (mastines) → 245
(T) Exploradores → 140
(T) Exploradores → 140
(T) Exploradores → 140
Mastines → 65
Mastines → 65
Gran Elemental de Tierra (Craggoth & Kholearn) [1] → 255
Lord en bestia (Hann´s Sanguinary Scripture) → 210
Portaestandarte de batalla (lute of insatiable darkness) → 75
PRIMERA RONDA.
Mi primer rival fue Santi Guerra, jugador de Imperio del Polvo. Su lista consistía en tres grandes hordas de infantería y tres de ushabits, desplegados en dos líneas con un nigromante. Además tenía algunos apoyos, como un enjambre, una unidad de voladores, una de disparos y un personaje pegón. Su despliegue fue sencillo: las dos líneas de hordas (infanterías y ushabits) en el centro, y los apoyos protegiendo flancos. Por mi parte le hice un despliegue en dos flancos, pues necesitaba separar ese bloque, así que puse en mi lado izquierdo las infanterías y en el derecho las caballerías. Con el avance de scout me posicioné en un bosque que tenía un muro adyacente, y que jugaron un papel fundamental en la partida.
Santi se me tiró encima a la primera oportunidad, lógicamente, pues el punto fuerte de su lista era precisamente el choque cuerpo a cuerpo. Desvió además la mayor parte de sus tropas hacia mi infantería, con la intención de limpiar rápido, pero mi posición defensiva en bosque y muro, así como mis tropas de exploradores, le penalizaron mucho y le hicieron perder varios turnos, lo que a mí me permitió limpiar el otro flanco con mis caballerías, girar y apoyar a mis infanterías, de las que, para ese entonces, tan solo quedaba con vida una de las hordas de rompeescudos. Al final de la partida a mi rival tan solo le quedaba con vida el nigromante, lo que me permitió ganar el escenario Invadir con 11 PU (mis caballerías, la horda de rompeescudos y el rey en bestia). El resultado fue 23-2 a mi favor.
SEGUNDA RONDA.
En esta ocasión mi rival fue Pascual, jugador de Cartagena y uno de los habituales de los torneos de la Comunidad Valenciana. Fue, de hecho, el campeón del último torneo, cuya crónica podéis leer AQUÍ. Nunca había jugado contra él, ¡y lo cierto era que tenía ganas!
Pascual, junto a Mario Murillo y Pablo Triguero, es uno de los rivales más duros de los habituales en nuestros torneos, así que ya sabía que me esperaba una partida dura. Lo que no me imaginaba es que lo sería TANTO.
Jugábamos el escenario Controlar, lo que significaba que había que dominar cuadrantes del campo de batalla, con el añadido de que los centrales eran los más importantes. Así pues, desplegué en el centro-izquierda mis infanterías y mis caballerías en los flancos, mientras que Pascual ofreció un centro compuesto por tres regimientos de disparo, colocó frente a mis infanterías otro regimiento de disparo y uno de caballería y situó frente a mis caballerías dos unidades de voladores y otro regimiento de caballería.
La partida se resolvió rápido. Mientras mis infanterías trataban de avanzar ante una lluvia de flechas, un mal posicionamiento por mi parte le permitió a mi rival ver una esquina del flanco de una de mis caballerías, la de mi flanco derecho. Una brutal carga múltiple a mis distintas unidades limpió ese flanco en dos turnos, y cuando comenzó mi tercer turno me encontré con mi flanco derecho roto y mi centro expuesto por flanco y retaguardia, mientras seguía la lluvia de disparos. La partida estaba perdida, y no pude menos que felicitar a mi rival por su excelente juego.
TERCERA RONDA.
En la última partida me enfrenté a Pablo Triguero, otro de los más duros rivales de la región. Ay. Llevaba una lista de goblins que me doblaba en número, por lo que desplegué de forma que no le fuese fácil rodearme, pues de lo contrario sabía que tendría la partida perdida. Él, por su parte, situó un frente muy pegón con vagonetas y disparos de lanzavirotes y magos con rayos, un flanco con caballerías y otro con hordas de infantería. El escenario era Salar la tierra, lo que significaba que había ¡siete! objetivos en el campo de batalla. Un escenario perfecto para ejércitos muy numerosos.
La partida no fue tan rápida como la anterior, pero lo cierto es que yo jugué muy mal y mi rival jugó muy bien. Mis enanos acabaron siendo barridos en el sexto turno, y, si bien maté algunas unidades, los goblins parecían no tener fin. ¡Aplastante y merecida victoria para Pablo!
CIERRE Y ENTREGA DE PREMIOS.
No hice un buen torneo. Es verdad que me enfrenté a dos de los jugadores más difíciles de la zona, pero también lo es que cometí un error imperdonable en la segunda partida y jugué muy mal la tercera. Y contra jugadores con el nivel de Pascual y Pablo, los fallos y el mal juego se pagan muy caros. Sin embargo quedé contento, pues, como suelo decir, para mejorar tu juego debes aprender de los mejores, y la mejor forma de hacerlo es enfrentarte contra ellos. (¡Aunque no hace falta que sean todos el mismo día!).
Respecto a mi lista, después de tantas partidas llevando tres bloques de elementales de piedra se me hizo muy cuesta arriba llevar un ejército que en su mayor parte no pasaba de defensa 4. También se me atragantó el movimiento 4 de los rompeescudos, pues contra rivales con disparo comprobé que, una vez eliminan las pantallas, quedo vendido ante cualquier cosa que tenga mi rival. Por otro lado, eché de menos un surge para mi gran elemental de piedra. Pese a todo eso la lista me gusta; me parece una lista buena y, además, bonita. ¡Pero tengo que aprender a jugarla!
El torneo lo ganó Pascual, mientras que el segundo y el tercer puesto fueron para Pablo Triguero y Mario Murillo respectivamente, cosa que no sorprendió a nadie, pues era de esperar que los tres ocupasen el podio. Por mi parte el hecho de saber que has tenido un mal torneo, pero que los dos rivales que te han ganado han quedado en primer y segundo lugar en el torneo, da cierto consuelo. Pero eso no me quitaba un décimo puesto de doce jugadores, ¡mi peor resultado desde los primeros torneos que jugué, cuando estaba todavía aprendiendo!
Mis felicitaciones al campeón del torneo, así como a Samu (de Sabre Miniatures), quién se llevó de forma muy merecida el premio a Mejor Ejército. ¡Sois dos grandes, chicos!
¡El próximo torneo más y mejor!
JOAQUÍN SANJUÁN